Si buscas un disco no monótono, que no se pueda encasillar en un género, que utilice variedad de instrumentos, que sea fresco e irreverente, y sobre todo novedoso, entonces el Odelay del prolijo Beck es lo que estas buscando, el quinto disco de este artista (segundo en una disquera grande) para este disco utilizó todo lo que cayese en sus manos guitarras, sintetizadores, trompetas, saxofones, etc; y se valió de diversos géneros como el pop (Devils Haircut), blues (Hotwax), country (Lord Only Knows), psicodelia (Readymade), rock (Minus), jazz (The New Pollution), funk (Sissyneck), hip-hop (High 5 (Rock the Catskills)), electrónica (Derelict), convirtiéndolo en un rompecabezas musical, haciendo la escucha de este disco un actividad sumamente divertida.
El Odelay es sin duda el disco más aclamado de Beck, eso se debe a que el artista jugó y probó todo lo que estaba a su alcance, un clásico pos claro que si.
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